Espacios y relaciones que transforman

Al cierre del 2º Seminario Internacional, Espacios y relaciones que transforman, como Red Solare Chile estamos muy agradecidos de haber compartido hermosas y profundas conversaciones sobre la educación infantil, con inquietos e interesados conversadores. Agradecidos por el cariño recibido de educadoras, artistas visuales, sicólogas, artistas de teatro, en fin personas de diversos ámbitos de la cultura que tienen estrecha vinculación con la cultura y educación infantil y que con bastante esfuerzo, vinieron de todas las regiones del país.

Disfrutamos el ragalo de estudiantes de la Escuela de danza de la Universidad Academia Humanismo Cristiano, cuyo mensaje nos acompañó durante los dos días de seminario.

A través de Elena Giacopini, nos adentramos en la pedagogía de las escuelas infantiles de Reggio Emilia y pudimos tener una visión amplia y profunda de cómo están llevando a cabo sus procesos educativos y pedagógicos que se centran en las relaciones de calidad entre los niños, los educadores y las familias; Loretta Bertani nos mostró la cultura del atelier que facilita a niños y niñas creativas experiencias, en el descubrimiento de sí mismos, de los demás y de su entorno y que expresan con sus múltiples lenguajes.

El Dr. Marcelo Garrido nos invitó a hacer una mirada distinta y, quizás pocas veces hecha por la educación infantil de nuestro país; desde la geografía, nos provocó a recoger elementos esenciales que permitirían a nuestros niños y niñas hacer procesos claves para que tanto en la escuela como en la sociedad, se sientan parte, incluidos y ciudadanos.

Muy interesante fue conocer las experiencias chilenas que se está inspirando y atreviendo a traspasar los limites de una pedagogía homogeneizadora que responde a los deseos y exigencias adultas; nos mostraron cómo en situaciones no del todo favorables, con normas que se aplican con rigidez, que inhiben la creatividad y autonomía de las educadoras y de las comunidades educativas, es posible dar espacios a la cultura infantil, al desarrollo y expresión de las enormes potencialidades de nuestros niños y niñas chilenos.

La conversación entre el Dr. Maturana, la profesora Ximena Dávila, la pedagogista y atelierista de Reggio Emilia y los participantes, nos hizo sentir nutridos, inspirados y esperanzados que es posible avanzar y mirar la calidad de la educación infantil chilena, más allá de los logros y resultados de aprendizajes. Nos hicieron pensar, sentir y ver aquello que funda y sustenta la práctica de una verdadera educación; el lugar que ocupan la escucha, el amor y el respeto en nuestra constitución biológica y cultural como seres humanos y que por tanto, deben estar a la base de las estrategias, métodos, planificaciones, organizaciones, evaluaciones, etc. que adoptemos.

Se nos hizo evidente que en Chile es posible hacer una re interpretación de las Bases Curriculares, Programas Educativos, Mapas de Progreso y los distintos marcos curriculares que instituciones o comunidades educativas han adoptado; se nos hizo evidente también, que es posible construir con las familias otra visión de la cultura e imagen de los niños y niñas y, hacer visible y dar prioridad en las escuelas y jardines infantiles, a la calidad humana de las relaciones que estamos practicando y ofreciendo a nuestros párvulos.